La novedad apunta a un plan de puesta en valor de los cementerios porteños, informó el Gobierno de la Ciudad.
El estado del Cementerio de la Chacarita no es el mejor, como se deja ver a simple vista con solo ingresar a sus instalaciones. Por eso, el Gobierno de la Ciudad anunció un plan de puesta en valor de este y su par de Flores y Recoleta con el fin de cambiarle la cara y mejorar su infraestructura. En ese contexto, se anunció que en las próximas semanas se producirá algo inédito en varias décadas: serán subastadas distintas bóvedas del predio.
La novedad es parte del plan de puesta en valor de los 3 cementerios públicos porteños en los barrios de Recoleta, Chacarita y Flores, según dio a conocer la Subsecretaría de Gestión Comunal, dependiente del Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana porteño, que lleva adelante estas tareas.
Todavía no fue precisada la cantidad total de bóvedas que serán subastadas en Chacarita. Aunque sí se sabe que serán incluidos dos terrenos con bóveda en predio de Jorge Newbery y Guzmán. La subasta se realizará en forma virtual, el próximo 24 de septiembre, en un acontecimiento histórico, ya que la última vez que se avanzó con una medida así fue en el año 1967.
Los espacios fueron tasados por el Banco Ciudad y a través de la plataforma de subastas de la entidad financiera se realizará el remate público, en formato online, ágil, seguro y participativo. La concesión de uno de los lotes a subastar tiene un precio base de $ 6.200.000 y consta de una planta a nivel formando capilla y dos subsuelos. Para participar de forma online en la subasta del Banco Ciudad por este lote se puede ingresar al siguiente link hasta el 20 de septiembre.
En tanto, la subasta del otro lote tiene un precio base de $ 11.700.000 y consta de una planta a nivel formando capilla y dos subsuelos para participar en la subasta pueden hacerlo ingresando al siguiente link, también con la misma fecha límite. En ambos casos, los interesados pueden coordinar una visita para conocer el terreno y la bóveda.
Vale mencionar que las bóvedas de los cementerios porteños están concesionadas y con el vencimiento de una concesión o la renuncia de los titulares a la misma se inicia un proceso de caducidad de la concesión. Así, la bóveda queda vacía y a cargo del Gobierno porteño. Una vez que se cumple este circuito administrativo, el Banco Ciudad realiza la tasación de los terrenos y bóvedas vacías, fija el precio base, se estipula la fecha para la subasta y se abre el período de inscripción de interesados.